El Festival Eyeife cerró el pasado 13 de diciembre de 2025 su novena edición reafirmando algo que ya muchos sabían: Eyeife dejó de ser solo un festival para convertirse en un espacio vivo de creación, intercambio y crecimiento de la música electrónica cubana.
Durante tres intensos días, Fábrica de Arte Cubano (FAC) fue nuevamente el epicentro del evento, con tres de sus naves tomadas por completo por sonidos electrónicos, performances, danza y una energía colectiva que confirmó la madurez alcanzada por esta cita nacida en 2016 de la mano de Suylén Milanés.
Con casi una década de existencia, Eyeife se siente hoy como una casa a la que se regresa. Así lo expresa Rafa Fergom, cofundador y director de marketing del festival, al destacar que el objetivo inicial no solo era crear un espacio para la música electrónica, sino hacer de ese espacio un lugar donde los artistas quieran volver, celebrar y crecer.
Y eso fue exactamente lo que se vivió en 2025:
DJs que dieron aquí sus primeros pasos compartieron escenario con nombres ya consolidados; artistas que hoy viven fuera de Cuba regresaron a la isla para reencontrarse con sus raíces; y creadores internacionales llegaron con la certeza de que Eyeife es una fuente de aprendizaje, diálogo y respeto cultural.
Uno de esos regresos fue el del DJ cubano Yongolailan, radicado en Nueva York, quien participó nuevamente tras haber obtenido el segundo lugar en el concurso Eyeife el pasado año. Para él, el festival representa “algo clave en la evolución de la música cubana”, especialmente por la manera en que logra unir electrónica experimental y raíces afrocubanas, dos universos que dialogan de forma natural dentro del evento.
El apoyo a los nuevos talentos sigue siendo una de las columnas vertebrales de Eyeife. A través de su concurso anual —que se desarrolla prácticamente durante todo el año— el festival acompaña, visibiliza y proyecta a quienes inician su camino en la música electrónica, materializando ese trabajo formativo directamente en el escenario.
Pero este 2025 marcó un paso aún más importante: Eyeife se lanzó oficialmente como plataforma cultural, bajo el nombre Eyeife Cultura. Un concepto que integra todas las iniciativas que mantienen vivo el proyecto más allá de los días del festival, como el concurso anual y Eyeife Women, espacio que cada marzo visibiliza el trabajo de las mujeres dentro del sector.
Así, hablar de Eyeife hoy ya no significa pensar solo en tres días de música electrónica en La Habana, sino en un catalizador de talento que opera durante todo el año, conectando artistas, saberes y culturas. Una plataforma que apuesta por la identidad cubana, abre puertas al intercambio internacional y proyecta hacia el mundo todo lo que está ocurriendo dentro de la escena creativa del país.
Eyeife 2025 cerró sus puertas, sí, pero dejó claro que su pulso sigue latiendo fuerte… los 365 días del año
Eyeife se construye desde la música, pero también desde las voces que la escuchan, la bailan y la viven.
Si asististe al Festival Eyeife 2025, seguiste el evento desde fuera o has sido parte de esta historia en ediciones anteriores, queremos leerte.
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¿Qué DJ o performance te sorprendió?
¿Crees que Eyeife ya es una plataforma cultural imprescindible para la escena cubana?
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