Daddy Yankee vuelve a ser noticia, pero esta vez fuera del estudio de grabación. El ícono global del reggaetón ha presentado una contundente demanda contra su exmánager Raphy Pina y contra Mireddys González, su esposa separada, acusándolos de encabezar una conspiración que habría desviado durante años las regalías de sus composiciones.
La demanda, presentada bajo la Ley RICO, uno de los estatutos más fuertes del sistema legal estadounidense —usualmente reservado para casos de crimen organizado—, describe lo ocurrido como un “ataque coordinado” contra las ganancias legítimas del artista.
Según el documento, Pina, González y otros colaboradores habrían incluido de manera fraudulenta el nombre de Pina como coautor en las hojas donde se dividen las regalías, permitiéndole beneficiarse sin haber participado en el proceso creativo. Daddy Yankee sostiene que este esquema habría operado durante casi una década, aprovechándose de la confianza personal y profesional que él depositó en su equipo.
La noticia ha encendido las redes y ha desatado un fuerte debate en la industria, donde muchos artistas han denunciado problemas similares en la administración de regalías. Con su acción legal, Daddy Yankee no solo busca recuperar lo que considera suyo, sino también sentar un precedente en la música latina.
Ahora, mientras el caso avanza, la comunidad musical sigue de cerca cada actualización. ¿Será este el inicio de un nuevo capítulo en la transparencia del negocio urbano? ¿O estamos ante uno de los conflictos más tensos entre figuras históricas del reggaetón?
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¿Cómo crees que esto afectará la industria y la relación con Raphy Pina?
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